De empleado a emprendedor
13/02/2014 1 comentario
Hay muchas fuentes de inspiración donde encontrar la idea de negocio que nos llevará al éxito. Del mismo modo, hay muchas vías para encontrar una idea de negocio que teníamos muy cerca y de la que no nos habíamos percatado.
Una de estas vías, muy habitual por cierto, es el propio trabajo por cuenta ajena, actual o anterior, del emprendedor.
Cuántos empleados se han dicho a sí mismos (o a otros): «esto que hacemos en la empresa lo puedo hacer yo, y seguro que lo haría mejor que mi jefe«.
Se despierta en ese momento un interés, una inquietud, un deseo que se acabará convirtiendo (si se dan las condiciones adecuadas) en la chispa que encenderá un proceso de emprendimiento.
En mi opinión, es una muy buena vía de inicio. Es más, considero que es, si no imprescindible, sí muy positivo haber trabajado en el sector o la actividad en la que nos vamos a introducir como empresarios. Conocer cómo funcionan las cocinas antes de dedicarnos a servir los menús.
Es muy positivo haber trabajado en el sector o la actividad
en la que vamos a emprender
Pero no es oro todo lo que reluce. Cuando trabajamos para otro, nos dedicamos a una (o varias) tareas, más o menos específicas sin preocuparnos de otras cuestiones más genéricas o transversales de la empresa.
Al ser nosotros «la empresa», debemos ser nosotros quienes tendremos que atender a todo. Podemos delegar en nuestro equipo, apoyarnos en colaboradores, externalizar, pero la responsabilidad y dedicación como empresarios es nuestra.
Hay que ser conscientes de que ahora somos nosotros quienes tomamos las decisiones. Y ahora son otros los que dependen de nuestras directrices. Es más complicado dirigir que ser dirigido.
Cuando emprendemos,
la responsabilidad y dedicación como empresarios es nuestra
Normalmente, en este punto nos acordaremos de nuestro jefe y tendremos una visión diferente, como mínimo. Nos daremos cuenta de que no es fácil la posición de emprendedor, de empresario, emprender no es soplar y hacer botellas.
Aunque conozco casos de empleados que tras probar la experiencia emprendedora han acabado volviendo a trabajar por cuenta ajena (incluso alguno ha vuelto con su antiguo jefe, que llegó a ser su competidor), también conozco muchos más que continúan su trayectoria emprendedora. Y es que, como decía al inicio de este post, esta vía de emprendimiento es muy positiva. Una buena forma de lanzarse a la piscina, habiendo probado el agua, aunque no haya nadado nunca en ella.
Si estás empleado por cuenta ajena, si trabajas para otro, y se ha encendido la chispa, deberías plantéartelo seriamente. Puede que emprender un negocio propio sea para ti. Si es así, ¡adelante!, pero no te confíes, prepárate, el camino no va a ser fácil, pero sí muy satisfactorio, seguro. Ya me contarás qué tal te fue.
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Saludos,
Sergio
muy buen post muy util